
Te presentamos 500 gramos de filetes de espaldilla de ternera Wagyu Full Blood. Los servimos con un grosor aproximado de medio centímetro y envasados al vacío.
La carne de Wagyu, que es originaria de Japón, es bastante excepcional. Tiene una especial terneza, un suave sabor gracias y un alto contenido de grasa infiltrada que le da un color rosado marmóreo. Ello es debido tanto a la genética de la raza como a su cuidada alimentación, a base de cereales, 100% vegetal y muy energética.
Nuestros Wagyu proceden de la ganadería de Mudéjar Wagyu, una pequeña explotación aragonesa pionera en la crianza de animales de pura raza, genéticamente 100% sangre de Wagyu de ascendencia japonesa. Aquí puedes descubrir cómo crían este ganado excepcional en su granja de Aliaga, Teruel.
Estos filetes de espaldilla de categoría de 1ªB Wagyu se obtienen de la zona del centro de la espalda, en la parte superior de la paletilla. El resultado son unos filetes grandes, alargados y con un nervio en la parte exterior del filete fácil de retirar.
Por el tamaño y la jugosidad que le da esa filtración de tejido gelatinoso, que se suma a la propia infiltración de grasa característica de esta especie, son muy apropiados para consumir a la plancha o rebozados con unas verduritas salteadas de acompañamiento o guisados en salsa.
Conservar a ≤ 8º C
Cocinar antes de su consumo
Información nutricional por 100 g
- Valor energético 289 kcal · 1209,18 kj
- Grasa 24,20 g de las cuales saturadas 8,92 g
- Proteínas 17,67 g
- Sodio 56 mg
- Hidratos de carbono 0,2 gr de los cuales azúcar 0 g
Este corte proviene de Mudéjar Wagyu. En este enlace encontrarás toda la información acerca de su manejo.
Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.
Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.
Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.
Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.
Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.
No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.