Te presentamos un paquete de unos 450-500 gramos de hígado de cordero ecológico fileteado y envasado al vacío. Si necesitas la pieza sin filetear, indícalo en el apartado “Instrucciones especiales para el vendedor”.
Debido a su corta vida útil debe consumirse rápidamente. Tolera bien la congelación y se pueden almacenar hasta 6 meses en el congelador. Es posible que te sirvamos este artículo congelado (en ese caso te lo haremos saber).
El hígado es una de las glándulas más rica en minerales (hierro principalmente), proteínas y vitaminas, especialmente vitamina A.
Su valor nutricional es aproximadamente el mismo independientemente del animal al que pertenece, pero el sabor y la textura difieren para cada uno de ellos. El de cordero es muy fino, de sabor delicado y extremadamente tierno. Tiene un aspecto brillante, liso y su carne presenta un grano fino.
Para que permanezca tierno, no se debe chamuscar demasiado rápido ni cocinar más tiempo de la cuenta: de 2 a 3 minutos por lado es más que suficiente para saborearlo simplemente rosado.
Las preparaciones más sencillas conservarán todo su aroma. Para preparar un plato fácil y rápido, bastará pasar los filetes por la plancha, engrasar con algo de mantequilla o AOVE y acompañar con patatas al vapor o champiñones, por ejemplo.
Si se hace frito es conveniente enharinarlo para que conserve toda su jugosidad.
Además, esto evitará salpicaduras.
También se puede preparar à la lyonnaise, acompañado de una exquisita guarnición de cebolla. La cebolla para esta preparación se corta en rodajas o se pica, se cocina lentamente en mantequilla hasta que está tierna, y finalmente se añade un poco de vino blanco o de vinagre que se deja reducir.
Otra opción es especiarlo, trocearlo y montar una brocheta para asarlo a la barbacoa.
El hígado también es el protagonista de las célebres Quenelles Alsacianas, una especie de albónigas hechas con hígado, cebolla picada, algo de tocino, miga de pan, ajo, sal, pimienta y nuez moscada. Una vez hechas las bolitas, rebozadas en huevo y pan rallado, se cuecen en agua durante unos 10 minutos. Y las quenelles están listas para degustar con un rico pinot noir.
Conservar a 4 ºC
Información nutricional por 100 g
- Valor energético 140 kcal
- Grasa 5 g de las cuales saturadas 1,3 g
- Hidratos de carbono 0 g de los cuales azúcar 0 g
- Proteínas 21 g
- Sal 0 g
Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.
Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.
Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.
Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.
Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.
No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.