Te presentamos un queso asturiano azul a la sidra de unos 350 g de producción ecológica. Si deseas más cantidad, en la pestaña PESO puedes seleccionar 1 kg.
Está elaborado artesanalmente con leche pasteurizada de vaca, con un tiempo de maduración mínimo de 60 días, en cámara simulando las condiciones naturales de afinamiento en cueva. Durante la maduración se perfora manualmente para facilitar el crecimiento del penicillium, el hongo que le aporta carácter y lo hace único.
Es un queso cremoso, tiene un sabor intenso y complejo, gusto a sidra y un toque amargo y ácido.
Como otros azules asturianos se puede degustar como aperitivo o como postre. Marida de manera excelente con un buen vaso de sidra artesana.
Este queso se elabora en la granja familiar Los Caserinos, ubicada en la Comarca de la Sidra, en la pequeña localidad de Maoxu. Es ya la cuarta generación la que elabora productos lácteos totalmente artesanales, comprometidos con el medio rural y la producción sostenible, de calidad diferenciada y ecológica.
Sus animales tienen una alimentación basada en el pastoreo rotacional utilizando métodos tradicionales. La leche recién ordeñada en sus propias instalaciones se traslada hasta la quesería inmediatamente, conservando así todas las propiedades organolépticas de manera óptima.
Ingredientes:
- leche pasteurizada de vaca
- fermentos
- sal
- cuajo
- sidra (baños)
Conservar entre 0ºC y 8ºC.
Valores nutricionales por 100 g de producto
- Valor energético 289 kcal 1202 kJ
- Proteínas 20 g
- Hidratos de carbono 3 g de los cuales azúcar 0,5 g
- Grasas 21,9 g de las cuales saturadas 15,5 g
- Sal 1,75 g
Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.
Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.
Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.
Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.
Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.
No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.