Haga su pedido online o por teléfono TeléfonoWhatsapp   +(34) 974 500 700

Envío GRATIS en España Península para pedidos superiores a 100€

Carrito de compra

Muslos de Pollo Eco 1 kg

€25,50

Disponibilidad:
Sin stock
Te presentamos un paquete con unos 3  muslos de pollo ecológico enteros, y un peso aproximado de 1 kg envasados al vacío. Si lo deseas, podemos prepararte estos mismos muslos de...

Bajo petición

Te presentamos un paquete con unos 3  muslos de pollo ecológico enteros, y un peso aproximado de 1 kg envasados al vacío.

Si lo deseas, podemos prepararte estos mismos muslos de pollo ecológico deshuesados. Simplemente marca esta opción en el selector de CORTE y te enviaremos las piezas ya deshuesadas y envasadas al vacío, que equivalen a un peso neto y acompañadas de los huesos.

Nuestros pollos son animales únicos, que son sacrificados a una edad similar pero muy diferentes unos de otros. No tienen nada que ver con el producto estandarizado que se obtiene de las granjas industriales de pollos de producción intensiva.  Por eso a veces son muy grandes; otras veces algo menos. Así, para hacer un peso de 1 kg en ocasiones nos bastan 2 piezas y otras veces necesitamos 3.

Los muslos contiene algo más de grasa que las pechugas, pero esta se concentra básicamente en la piel, que es muy fácil de retirar. Por ello son adecuados en dietas de control de peso. Además tienen la ventaja de que se pueden preparar en muy poco tiempo, con muy poco esfuerzo y de un millón de formas. Además de al horno, a la parrilla, o guisados, te recomendamos hacer con ellos unas brochetas: solo tienes que deshuesarlos y marinar la carne troceada con las especias que más te apetezcan durante una hora; prepara las brochetas con pimientos berenjenas y tomate, ásalos y sirve con tu salsa favorita. Estarán para chuparse los dedos.

El pollo es uno de los alimentos más sanos y puede estar presente en una dieta saludable varios días a la semana. Aporta una importante cantidad de proteínas, vitamina B3 y minerales como el hierro, el zinc, el fósforo y el potasio, además de los beneficiosos ácidos grasos monoinsaturados. 

Esta carne está libre de antibióticos y hormonas, ya que los animales han sido criados de forma ecológica y sin transgénicos, con tiempo y respetando su ciclo natural.
Por eso es consistente y compacta, pero tierna, sabrosa, muy jugosa y saludable para toda la familia.

Conservar a 3º C
Cocinar antes de consumir

Información nutricional por 100 g

  • Valor energético 110 kcal · 460,55  kj
  • Grasa 3,40 g de las cuales saturadas 1,40  g
  • Hidratos de carbono 0 g de los cuales azúcar 0 g
  • Proteínas 19,5 g
  • Sal 0 g

Si sigues una dieta libre de soja, puedes indicárnoslo en el apartado Instrucciones especiales para el vendedor. Seleccionaremos para ti pollos criados exclusivamente con maíz, trigo, cebada y avena.

En este enlace encontrarás toda la información acerca de la crianza y alimentación de nuestros pollos ecológicos.

Nuestro pollo ecológico cuenta con el certificado Halal, un documento emitido por el Instituto Halal que certifica cumplen con lo que establece la Ley Islámica para su consumo y que garantiza la trazabilidad completa de la cadena alimentaria, desde la granja hasta el plato. Puedes encontrar el documento en este enlace.

Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.

Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.

Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.

Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.

Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.

No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.