El atún es un buen quemagrasas
El yodo del atún
El yodo es un oligoelemento, es decir que se trata de un mineral que nuestro cuerpo solo necesita en pequeñas cantidades. Pero es muy necesario, imprescindible para mantener en perfecto estado las funciones de la tiroides. De hecho, la tiroides usa el 80% del yodo que se absorbe con la comida.
Esta glándula produce básicamente dos hormonas, la tiroxina (o T4) y la triyodotironina (o T3), y ambas necesitan del yodo de la dieta para poder sintetizarse. Estas hormonas afectan prácticamente a todos los tejidos del cuerpo, aumentando el consumo de oxígeno y mantienen la temperatura corporal gracias al aumento de la termogénesis. Asimismo, influyen en el crecimiento corporal (son necesarias para la síntesis de proteínas), y también en el metabolismo de los hidratos de carbono y las grasas. Por eso, el yodo es muy importante para el crecimiento, e igualmente es fundamental para quemar grasas.
Otras funciones del yodo
Además, el yodo es un potente agente antibacteriano, y por eso se ha usado como desinfectante tópico desde hace muchos años. El yodo se encuentra abundantemente en el agua marina: por eso los baños en el mar ayudan a la cicatrización de heridas de la piel. Y por eso la sal marina es una buena fuente de yodo si la añades a tus comidas.
La deficiencia de yodo puede provocar síntomas pasajeros como fatiga constante, aumento de peso inusual, debilidad muscular, frío (incluso cuando hace calor), poca concentración, mala memoria, bajo estado de ánimo y estreñimiento, entre otros. Pero cuando la falta de este mineral es crónica, se puede padecer bocio e hipotiroidismo. Igualmente, su exceso es problemático, y hay que cuidar de no exceder las cantidades de yodo ingeridos. Podríamos padecer ardor de boca, garganta y estómago, fiebre y náuseas, y llegar a tener alteradas las funciones tiroideas, inflamación de tiroides y hasta cáncer tiroideo.
El atún: una buena fuente de yodo
El yodo solo se almacena en cantidades limitadas, así que es importante tomar alimentos con buenos porcentajes de yodo para mantener sus niveles corporales. Las fuentes más importantes de yodo son los pescados y mariscos, ya que gran parte de su carne tiene agua marina, con alta concentración de yodo.
El atún en conserva que te ofrecemos en Carnísima es una buena fuente de yodo, con lo que contribuye a que tus niveles de este oligoelemento sean óptimos para el buen funcionamiento de la tiroides. Así, consumiendo nuestro atún con regularidad ayudarás a que tu cuerpo mantenga fácilmente la temperatura corporal y a que queme grasas con rapidez. Comiendo atún en aceite de oliva virgen extra ecológico como el que encuentras en nuestra web mantendrás las tiroides en perfecto estado.
Recuerda que, además, el atún de Carnísima, obtenido de lomos de atún listados seleccionados individualmente, va envasado en un práctico bote de vidrio y conservado en aceite de oliva virgen extra ecológico, lo que aumenta su valor nutricional y mejora su sabor y jugosidad. Tiene una alta proporción de proteínas, casi no contiene hidratos de carbono y, de sus grasas, solo un 15% son grasas saturadas. La cantidad de omega 3 que contiene convierte este alimento en perfecto para la protección de tu sistema circulatorio y tu corazón. Además, ¡está buenísimo!