Te presentamos un tarro de vidrio con 70 g de nuez moscada molida de producción ecológica.
La nuez moscada puede utilizarse tanto para preparaciones saladas como dulces. Este polvo fino de sabor picante libera un aroma excepcional que aporta una nota de sutileza a recetas generosas de carnes, sopas, bechamels, verduras, purés y platos a base de patata en general. Es un ingrediente esencial en un gratinado dauphinois o una clásica quiche de Lorena. También va genial con postres y platos dulces, en los que se obtiene un resultado sorprendente: postres a base de chocolate, naranja, caramelo, compotas de frutas, en particular de manzana, arroz con leche o pan de jengibre.
Con su fuerte poder aromático y su cálido y envolvente sabor, es una especia muy poderosa, que debe usarse con moderación y dosificarse con cuidado.
Para realzar los sabores puedes integrarla en tu receta al final de la preparación, pues se evapora rápidamente.
En Naturcid, las plantas limpias, frescas, aromáticas, llenas de vida y color, desde un origen siempre controlado, siguen un proceso de cribado y limpieza manual, único en el sector. Con ellas elaboran un producto de calidad, limpio y libre de residuos, bueno para nuestra salud y para el planeta, certificados por el Comité de Agricultura Ecológica de la Comunidad Valenciana (CAECV).
Cuando elegimos productos respetuosos con el medio ambiente, estamos eligiendo cuidar de nuestra salud y nuestro bienestar, por eso las especias y condimentos ecológicos son importantes y pueden ayudarte a llevar una alimentación natural.
Disfruta en la cocina con estos condimentos y déjate llevar por la alquimia de los ingredientes, sus aromas y sabores. ¡Querrás invitar a comer a todo el mundo!
Sin alérgenos
No contiene organismos modificados genéticamente (No GMO) ni irradiados.
Envase libre de BPA.
Conservar a temperatura ambiente, en un lugar fresco y seco protegido de la luz.
Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.
Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.
Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.
Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.
Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.
No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.