Te presentamos una bolsita con 30 gr de kiwi deshidratado 100%, ecológico y natural, sin azúcares añadidos, sin conservantes, ni aditivos.
El contenido de esta bolsita equivale a dos kiwis frescos y conserva su fibra, todas sus vitaminas y antioxidantes y sus hidratos en forma de azúcares naturales que aportan energía de forma inmediata (esta ración tiene 89,4 calorías).
Para disfrutar al máximo de su sabor degústalo pausadamente. Cada trocito se rehidratará en tu boca, como un caramelo, y una vez blandito podrás masticarlo y disfrutar de su intenso sabor y su interesante textura. Come despacio, saborea y disfruta el momento. Esta ingesta pausada y consciente, disminuye la ansiedad, te sacia antes y te ayudará a comer menos. Obtendrás una explosión de sabor en cada bocado.
Pruébalo en yogures con frutos secos. Va genial como picoteo, con tus cereales del desayuno, en ensalada o en un te. Pero nunca lo rehidrates antes de usarlo, pues perdería todo su sabor.
Este snack es saludable y lo puedes tomar donde y cuando quieras. Es una forma atractiva y sencilla de introducir el kiwi en la dieta de los niños: no pesa, no mancha, no se oxida, no se chafa, no hay que pelarlo y contiene mucha energía y nutrientes en muy poco espacio.
En Natursnaks elaboran esta fruta deshidratada con kiwis ecológicos gallegos y asturianos de primera calidad, escogidos en el punto óptimo de maduración desde el invierno hasta el principio de la primavera. Para que conserve sus propiedades inalteradas, una vez cortada cuidadosamente se coloca de manera manual en bandejas y se deshidrata en un secador solar con aire caliente lentamente y a baja temperatura (45 º C).
Ingrediente Kiwi ecológico 100 %
Valores nutricionales por 100 g de producto
- Valor energético 297,9 kcal 1251 kJ
- Proteínas 1,8 g
- Hidratos de carbono 65,1 g de los cuales azúcar 64,7 g
- Grasas 1,6 g de las cuales saturadas 0 g
- Sal 0 g
Conservación: Una vez abierto mantener el envase cerrado. Conserva alejado de la luz solar, en un lugar fresco y seco
Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.
Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.
Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.
Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.
Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.
No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.