
Te presentamos de carne 100% Wagyu Full Blood, envasado al vacío. En la pestaña PESO puedes seleccionar si deseas un paquete de 500 g o de 1 kg.
De textura suelta, su sabor se potencia al fundirse la grasa. Resulta excepcional para preparar hamburguesas, pero también para hacer tus albóndigas favoritas, lasañas o verduras rellenas.
La palabra “wagyu” sigfinica “carne de Japón” y es que esta valorada raza de vacuno es originaria del país del sol naciente.
Hasta hace apenas unos años esta carne solo podía degustarse en su país de origen (donde se conoce como Kobe), pero en los últimos años han florecido las ganaderías que crían esta exclusiva raza de ganado por todo el mundo. Nuestro proveedor es Mudéjar Wagyu y en este enlace puedes descubrir cómo crían este ganado excepcional en su granja de Aliaga, Teruel.
La carne de Wagyu tiene un alto contenido de grasa. Ello es debido tanto a la genética de la raza como a su cuidada alimentación, a base de cereales, 100% vegetal y muy energética.
Se trata de grasa con un alto contenido en ácidos insaturados omega 3 y omega 6, lo que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y la convierte en un alimento saludable que, igualmente, hay que consumir con moderación.
Esta grasa está infiltrada en el músculo a un nivel tal que proporciona a la carne un aspecto marmoleado, característico de la carne de Wagyu. Esta es la clave de su gran sabor, de su jugosidad y de las increíbles sensaciones que produce en la boca. Y es que es tan tierna que se muerde con la misma facilidad con la que se le da un bocado a un pastel. Este es el motivo por el que se considera una de las mejores carnes del mundo.
Con una textura de escándalo hasta el punto de derretirse en la boca y un profundo golpe Umami, esta carne opulenta por su contenido en grasa, resulta sin embargo elegante, ligera y de fácil digestión.
Nuestro Wagyu es criado por Mudéjar Wagyu. En este enlace encontrarás toda la información acerca de su manejo.
Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.
Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.
Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.
Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.
Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.
No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.