Te presentamos un paquete de 1 kg. de harina de garbanzos, sin gluten y de producción ecológica.
La harina de garbanzos es una excelente alternativa a la de trigo por su gran sabor y su versatilidad. Además de preparar falafel o hummus, puedes utilizarla para rebozar verduras (berenjenas, alcachofas…), para espesar sopas o para hacer hamburguesas veganas (te ayudará a compactar la masa). También la puedes añadir a las masas para obtener productos horneados suaves con corteza crujiente y dorada. Prueba a hacer unos deliciosos pancakes con tus ingredientes favoritos, dulces o salados ¿quizá con espinacas?
Los garbanzos están libres de gluten por lo que con esta harina podrás preparar sabrosos platos vegetarianos sin gluten.
La harina de garbanzos aporta energía para tu cuerpo y para tu cerebro para todo el día, gracias a sus hidratos de carbono. La fibra te ayudará a sentirte bien y saciado.
Biopalacín Planet es una empresa familiar que gestionando los recursos naturales de forma respetuosa y cuidando la tierra nos ofrece alimentos limpios, saludables y nutritivos sin la necesidad de usar agroquímicos de síntesis, sin OMG’s y con sabor auténtico. Ellos mismos cultivan, transforman y envasan sus productos en su finca de Pomar de Cinca, en Huesca. Sus cultivos están perfectamente adaptados al clima y la topografía de la zona y se riegan con agua del Pirineo. Su propia ganadería de ovejas y vacas les aporta materia orgánica de calidad para fertilizar los campos. Sus productos están certificados por el comité aragonés de Agricultura ecológica ES-ECO-006-AR
Ingredientes harina de garbanzo de producción ecológica
Conservación: te recomendamos guardar esta harina de garbanzo ecológica en un lugar fresco y seco y conservarla en un recipiente hermético.
Valor nutricional medio por 100 g
- Valor energético 1486 kilojulios 355kilocalorías
- Grasas 5,4 g de las cuales saturadas 0,5 g
- Carbohidratos 48,6 g de los cuales azúcares 4,5 g
- Proteínas 21 g
- Sal 0 g
Peso neto 1 kg
Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.
Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.
Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.
Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.
Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.
No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.