Te presentamos un tarro de 200 gr de deliciosa salsa picante para tus platos mejicanos o simplemente para disfrutar con unos ricos chips de maíz. Además de ser ecológica, no tiene azúcares añadidos.
Esta salsa picante a base de tomate, cebolla, pimienta de cayena y auténticas hierbas mexicanas resulta deliciosa para mojar crujientes nachos o vegetales frescos. ¿Prefieres menos picante? Entonces nuestra salsa suave es más adecuada para ti.
Su clásico sabor picante, expresivo y muy aromático, también combina a la perfección con los demás ingredientes de tus tacos, fajtas, tortillas, burritos, ensaladas y platos a la parrilla.
Los nachos, el maíz, la carne de pollo, cerdo o ternera, los pimientos de colores, los tomates y las cebollas no pueden faltar en tu comida mejicana en la que nuestra salsa picante pondrá color y sabor.
Amaizin es una gama de deliciosos snacks orgáecológicos e ingredientes exóticos para comidas, procedentes de los mejores productores locales de todo el mundo. Toda la gama Amaizin se ha inspirado en recetas locales de Méjico.
Almacenar en un lugar seco.
Una vez abierto, conservar refrigerado.
Ingredientes:
- Concentrado de tomate eco
- Vinagre eco
- Cebolla eco
- Jarabe de maíz eco
- Pimentón rojo eco
- Pimentón verde eco
- Almidón de arroz eco
- Sal marina
- Tamari eco (soja y sal marina)
- Harina de maíz eco
- Levadura eco
- Acido cítrico
- Pimienta de cayena eco
- Polvo de curry indio eco (contiene mostaza)
- Maltodextrina de maíz eco
- Hierbas y especias eco (puede contener apio).
Valores nutricionales por 100 gr
- Valor energético: 322 kJ · 76,9 kcal
- Grasas: 0,2 g de las cuales saturadas: 0 g
- Hidratos de carbono: 16,5 g de los cuales azúcares: 12,2 g
- Sal: 1,4 g
Te enviamos nuestra Carne Buenísima envasada al vacío en paquetitos del peso indicado en la descripción del artículo.
Te recomendamos sacarla del frigorífico entre 20 minutos y una hora antes de cocinarla (dependerá del grosor del corte), para que se atempere y se cocine uniformemente.
Si la has congelado, sácala al menos 24 horas antes de cocinarla y deja que se descongele poco a poco en el frigorífico.
Toda nuestra carne es fresca. Puedes congelar lo que no vayas a consumir de inmediato.
Únicamente podríamos servirte ultracongelado el hígado u otras vísceras, debido a su corta vida útil. Te explicamos esta posibilidad en la descripción del artículo. En ese caso te informaremos para que lo tengas en cuenta.
No laves la carne ya que agua es un vehículo perfecto para facilitar la expansión de los microorganismos y podrías contaminar los alimentos. La mejor forma de higienizarla es el calor: cocínala siempre por encima de unos 65ºC. Si quieres consumirla en crudo te aconsejamos congelarla previamente.